LAUDUM A UNA PAREJA FORMIDABLE
En el noble territorio de la cultura, donde el arte florece como los jardines eternos de la creación, emerge una figura cuyo nombre es sinónimo de dedicación y grandeza: María Consuelo Giner. Hoy, el Club de los Leones de Alicante rinde homenaje a una mujer cuya labor es incansable en favor de las artes, la música y el saber ha dejado una huella indeleble en cada socio de Espejo de Alicante (y otros grupos) que han tenido el privilegio de cruzarse en su camino. No bastan las palabras para abarcar el caudal de talento y pasión que ha entregado a los largo de esto 21 años de EDA. Este homenaje es un gesto encomiable que intenta, aunque con modestia, reconocer esa grandeza.
Profesora del conservatorio, doctora, maestra en todas las formas del arte que tocan la vida, María Consuelo no es solo una académica admirable; es, ante todo, el corazón palpitante de la cultura. Ha cultivado el arte de la música con la sabiduría de quien sabe que cada nota es un eco del alma humana. Su currículum impresiona, sí, pero es su presencia la que transforma. María Consuelo tiene el don divino de la ubicuidad, como si habitara en todos los rincones donde se teje el arte, donde se respira cultura. Allí está ella, siempre, como una musa invisible, inspirando y sosteniendo a quienes, como nosotros, nos dejamos envolver por las maravillas del arte.
No quiero olvidarme de Paco Burló, su compañero fiel, secretario, escudero y no sé cuántas cosas más. Con él a su lado, María Consuelo brilla aún más, porque Paco es ese apoyo invisible pero inquebrantable, el sostén en las sombras que refuerza EDA. Juntos son una pareja admirable, un dúo cuya amistad me honra desde hace más de veinte años. Ellos, con su calidez y su generosidad, han entrado en mi vida para quedarse, como amigos leales y auténticos.
Hoy, este homenaje no es solo mío, es de todos los que han sido tocados por su bondad, su entrega, y su amor por la cultura. María Consuelo, Paco, gracias por ser faros de luz en el vasto bosque de la cultura en general. Mi satisfacción es profunda al haberlos conocido, y más aún al poder llamarles mis amigos.
Ramón Palmeral
Pinto, escritor y socio de honor de Espejo de Alicante
Leído por la rhapsoda Isabel Núñez de Arenas, en Alicante 27-10-2025
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