Espiritualidad y enigmas de la tridimensionalidad de "La Santa Cena" 1955 de Salvador Dalí
La obra "La última cena" de Salvador Dalí (1904-1989) la considero la obra más destacada del surrealismo de todo el siglo XX. Dimensiones 167 cm × 268 cm. Terminada en 1955. Si quieres verla has de ir a la Galería Nacional de Arte, Washington en los Estados Unidos. Es un fascinante ejemplo de la tridimensionalidad espiritual que el artista de Figueres logra transmitir a través de su surrealismo psicoanalítico religioso. En esta interpretación única de la icónica escena bíblica, Dalí fusiona elementos religiosos con su distintivo estilo surrealista geométrico y Mediterráneo, creando una obra magistral llena de simbolismo y misterio.
Composición geométrica
En primer lugar, la elección de representar la escena en un dodecaedro (1) en lugar de en un espacio convencional añade una dimensión adicional de complejidad y profundidad a la composición. Este poliedro geométrico no solo desafía las convenciones espaciales, sino que también sugiere una interpretación simbólica más profunda, quizás relacionada con la espiritualidad y la universalidad de la cena.
El triángulo áureo simboliza la armonía, la belleza y la proporción perfecta. Se cree que la proporción áurea es estéticamente agradable y se encuentra en muchas formas naturales y obras de arte históricas. El triángulo áureo, también conocido como triángulo de oro o triángulo dorado, es un triángulo rectángulo que tiene proporciones basadas en el número áureo, también conocido como la proporción áurea o número de oro. Este número, aproximadamente 1.618, ha fascinado a matemáticos, artistas y filósofos a lo largo de la historia debido a su presencia en la naturaleza, el arte y la arquitectura.
El fondo transparente del mar de Figueras
La marina de fondo es lo que veía Dalí desde su casa de Portlligat, con su atardecer ocre y ambiguo, añade otra capa de significado. La elección de representar un atardecer en lugar de un amanecer puede simbolizar la idea de un nuevo comienzo o de la renovación espiritual, sugiriendo la esperanza y la redención incluso en los momentos más oscuros.
La presencia del mar y las rocas de Figueras en la Costa Brava española, elementos característicos del entorno amado por Dalí, añade un toque personal y autobiográfico a la obra de su casa de Portllugat. Estos elementos podrían interpretarse como una conexión entre lo divino y lo terrenal, entre el mundo espiritual y el mundo material.
Imagen de Jesús
La transparencia y la gradación utilizadas en la representación de Jesús nacido del mar, en el centro del centro, sugieren su naturaleza divina y etérea, mientras que la presencia de su torso sobre él puede interpretarse como un símbolo de su sacrificio y su conexión con la humanidad. El gesto de las manos forma la bendición que señala a Dios superior y Supremo, que está pintado arriba gigante con los brazos abiertos en símbolo de protección como un arco.
La representación de Jesús en el centro, sin barba y con el pelo claro o rubio, es una desviación de la iconografía tradicional, pero podría sugerir una visión más contemporánea y accesible de Cristo divino. Su posición en la composición, con las manos extendidas en un gesto de entrega, enfatiza su papel central en la escena y su mensaje de amor y redención. Con la barca en transparencia simboliza el pescador de hombres. Los expertos coinciden que el rostro de Jesús es el de su musa Gala con largos cabellos rubios, sin barba.
Los doce apóstoles
Los doce apóstoles, con sus gestos de obediencia con túnicas diferentes, parecen representar la diversidad de la humanidad y la universalidad del mensaje de Jesús: "Amaos los unos a los otros". Esta variedad de representaciones humanas dentro de la obra refuerza la idea de comunión y la aceptación en la espiritualidad divina como camino de salvación.
Técnicamente los 12 comensales a la Mesa del Señor se hallan en contraluz con la cabezas agachadas en señal de oración, y sumisión al Maestro. El Santo Grial es un vaso de vino tinto y dos trozos partidos de un pan sobre un impoluto mantel blanco de pureza. "Tomad y bebed todos de él, porque esta es mi sangre, sangre de la alianza nueva y eterna..."
Pintura como alquimia y símbolo espiritual:
En muchas tradiciones culturales, la pintura ha sido un medio para expresar ideas espirituales y trascendentales. Desde las pinturas rupestres prehistóricas hasta las obras maestras renacentistas y más allá, los artistas han utilizado el arte visual para representar conceptos abstractos, emociones profundas y realidades espirituales. La pintura al óleo permite transparencias puede ser un medio para explorar lo divino, lo sagrado y lo misterioso.
Conclusiones
En resumen, "La última cena" de Salvador Dalí es mucho más que una simple reinterpretación de una escena bíblica. Es una obra rica en simbolismo y significado, que invita al espectador a reflexionar sobre la espiritualidad, la trascendencia y la universalidad del mensaje cristiano. Es sin duda para mí la mejor obra destacada de Dalí, de una dificultad extrema en su composición, realización, símbolos y originalidad pasmosa. Obra propia de un genio superior.
Notas
1). El dodecaedro es un sólido geométrico con doce caras pentagonales. En la geometría sagrada y esotérica, el dodecaedro se asocia con varios significados simbólicos:
Universo y Cosmos: Se cree que el dodecaedro representa la totalidad del universo o el cosmos. Sus doce caras simbolizan las doce constelaciones principales o las doce divisiones del zodiaco.
Elemento Éter o Quintaesencia: En la antigua filosofía griega, el dodecaedro se asociaba con el quinto elemento, el éter o quintaesencia, que era considerado como la esencia divina que permeaba todo el universo.
Perfección y Armonía: Al igual que otros sólidos platónicos, el dodecaedro se considera un símbolo de perfección y armonía. Sus proporciones geométricas se consideran intrínsecamente equilibradas y armónicas.
Conciencia y Espiritualidad: Algunas tradiciones esotéricas sugieren que el dodecaedro es un símbolo de conciencia elevada y espiritualidad. Se cree que meditar en la forma del dodecaedro puede ayudar a expandir la conciencia y conectar con dimensiones superiores de la realidad.
Geomancia y Energía: Se dice que el dodecaedro tiene propiedades energéticas especiales y puede ser utilizado en prácticas de geomancia y armonización de espacios. Algunas personas utilizan objetos en forma de dodecaedro en sus hogares o lugares de trabajo para promover un ambiente de equilibrio y armonía.
En resumen, el dodecaedro es un símbolo multifacético que representa la totalidad del universo, la espiritualidad, la perfección geométrica y la armonía cósmica en varias tradiciones esotéricas y de geometría sagrada.
Breve biografía
Salvador Felipe Jacinto Dalí i Domènech, marqués de Dalí de Púbol (desde 1982 por Juan Carlos I), nació en Figueras, España, el 11 de mayo de 1904 y falleció el 23 de enero de 1989 en el mismo lugar. Su padre, Salvador Dalí i Cusí, era notarfio, de carácter estricto, su madre era Felipa Domènech i Ferrés, quien alentaba los intereses artísticos del joven Salvador.
Fue un pintor, escultor, grabador, escenógrafo y escritor, considerado uno de los máximos representantes del surrealismo.
Con solo 12 años se adentró en el mundo de la pintura por unos amigos de sus padres. A los 18 comenzó a estudiar en la Real Academia de Bellas Artes de San Fernando, de donde fue expulsado en 1926. Amigo persona de Federico García Lorca y de Buñuel, a los que conoció en la Residencia de Estudiantes de Marid. Un año más tarde, viajó a París, donde conoció a Pablo Picasso.
En París se vio florecer el surrealismo de Dalí así como su característico bigote inspirado en Diego de Velázquez (según se autorretrató en Las Meninas). En 1929 conoció a la que sería su gran amor y musa, una inmigrante rusa 11 años mayor que él conocida con el nombre de Gala. Compró en 1970 un castillo papa ella. El castillo de Púbol es una fortificación gótica-renacentista del siglo XI situada en la pedanía de Púbol, perteneciente al municipio de La Pera, en el Bajo Ampurdán, que se convirtió en centro de la baronía de Púbol.
En 1941 se mudaron a Estados Unidos donde pasaron 8 años hasta que en 1949 volvieron a Cataluña, donde permanecieron hasta sus últimos días. Finalmente murió el 23 de enero de 1989 por un paro cardiorrespiratorio, a los 84 años de edad.
Ramón Palmeral
Pintor y escritor alicantino
Alicante 29 de abril de 2024 (derechos reservados)