Cien años de la visita de Joaquín Sorolla a Calp
La población de Calp fue una de ellas, y aunque no conocemos ningún dibujo o pintura de la mano de Sorolla, sí que sabemos que visitó la población el 13 de enero de 1919
Fig. 01: Manuel Cantos. Joaquín Sorolla Bastida. Noviembre de 1918 – Enero de 1919 (Museo Sorolla, nº inv. 80186)
El presente año de 2023, ha sido declarado como el Año Sorolla por ser el centenario de la muerte del gran pintor valenciano. A lo largo de la vida de Sorolla, el pintor realizó una multitud de viajes por diversas ciudades y poblaciones de toda España, dejando impresiones y en muchos casos dibujos, notas de color y pinturas mostrando sus paisajes o tipos populares. La población de Calp fue una de ellas, y aunque no conocemos ningún dibujo o pintura de la mano de Sorolla, sí que sabemos que visitó la población el 13 de enero de 1919.
Fig. 02: Anónimo. Sorolla en Alicante. 1918-1919 (Museo Sorolla, nº inv. 80721)
Pongámonos en situación. Corría el mes de enero de 1919 y Joaquín Sorolla se encontraba en la ciudad de Alicante, concretamente en la finca El Carmen (hoy El Palmeral), realizando uno de sus grandes paneles para la biblioteca de la Hispanic Society of America en Nueva York, concretamente el penúltimo de ellos titulado El Palmeral. Ya había terminado su cuadro cuando decidió realizar una excursión que le llevó por Benidorm y Dénia hasta regresar a Xàbia, una población que había visitado en los años de 1896, 1898, 1900 y 1905 y en donde había realizado un total de 136 cuadros.
Fig. 03. Fragmento de la carta de Joaquín Sorolla (Alicante) a Clotilde García del Castillo (Madrid), 14 de enero de 1919 (Museo Sorolla, nº inv. CFS1958)
Sorolla tenía 56 años, con un físico bastante deteriorado y envejecido. Tras haber pasado la noche del día 13 de enero en una pensión de Gata de Gorgos, decide encaminarse para Calp. A su llegada, un grupo de niños del lugar le reconocen y le reciben con júbilo. El propio pintor narró a su esposa sus impresiones sobre la población de Calp y el paisaje con el Peñón de Ifach, así como lo que hizo:
“De Gata a Calpe hay dos buenas horas de camino que pasamos muy bien y sin darnos cuenta contemplando las maravillosas sierras y los bonitos almendros, pasamos varios pueblos que tienen con el paisaje seco cierto aire toledano, pero con naranjos y geranios magníficos sobre sus blancos tapiales y los puntiagudos cipreses. Llegamos a Calpe... ya en las cercanías nos recibieron un enjambre de chiquillos con esas caras tan levantinas y tan libres de movimientos, y llegaban hasta mí los comentarios: «ahí va el millor pintor del món que le dicen»...
Fig. 04. Vista de Calp. Principios años 50 (www.historiadecalp.com)
Cruzamos el pequeño e insignificante pueblecito de pescadores y bajamos a la playa... allí ante nuestros ojos apareció el colosal Cap de Ifach... monstruo de piedra de igual color que el de San Antonio, pero de 300 metros de altura... Esa mole está aislada y sólo le une a la tierra una pequeña cinta de tierra.
La esbeltez y la grandiosidad son inenarrables, hay que verlo, parece la base para colocar encima una estatua como la Victoria de Samotracia de cien metros de altura.
Fig. 05. Plazoleta de la iglesia. 1973 (www.historiadecalp.com)
La mañana muy hermosa favorecía la excursión, visitamos el pueblo, pobrecito como te digo, y vimos la iglesia humilde y alegre pues entraba el sol, pero allí tuve la sorpresa de encontrar una tabla muy buena con tres santos que a mí me parece valenciana y muy bien conservada.
Allí en casa del Alcalde almorzamos arròs a banda y muchos pescados, todo fue cosa del mar, más un pollo que debió escapársele a la cocinera.
Tomamos el tren a la 1 ½ y a las 4 en Alicante, algo cansado pero animoso; me he lavado las manos pues con este viaje el aseo anduvo muy remal”.
Joaquín Sorolla llega a una pequeña población de pescadores muy empobrecida en este año. Su alcalde era Miguel Roselló Ivars y en su casa disfrutaron de los productos del mar que habían pescado los lugareños. Además de admirar el Peñón, Sorolla recorrió sus calles de casas encaladas, vería el baluarte con sus muros que encerraban el núcleo más primitivo o pasaría por el Ayuntamiento con su torre y reloj público.
Fig. 06. Tabla gótica de San Antonio Abad, San Cosme y San Damián en la iglesia de Ntra. Sra. de las Nieves de Calp
También llegaría a atravesar los muros de la antigua iglesia de Nuestra Señora de las Nieves. En su interior le llama la atención la tabla del siglo XV en donde aparecen las imágenes de San Antonio Abad, San Cosme y San Damián, una pintura que a Sorolla le parece valenciana, y no estaba mal encaminado ya que al día de hoy está atribuida a un discípulo del pintor Juan Rexach (Ha. 1411 – 1485 o 1492), quien destacó por introducir el estilo hispano flamenco en la Corona de Aragón y concretamente en Valencia.
Una lástima que Joaquín Sorolla no se quedara más tiempo, y que no realizara ningún dibujo o pintura rápida de lo que estaba viendo, por lo menos hasta hoy conocido. Eso no quita que el famoso pintor, dejara descrito sus propias impresiones del lugar haciendo constar su excursión. Aunque no pudo ser Sorolla, otros pintores
David Gutiérrez Pulido
Historiador del Arte
www.sorollajavea.wordpress.com