La abstención
le puede beneficiar a los partidos de izquierdas, porque así evitarán el
peligroso voto masivo de los indecisos (los votos maleables o del salto), que
puede ir de un partido a otro. En cambio los militantes de un partido determinado
siempre irán a votar. Por ello abstenerse sería una gran negligencia ciudadana.
Se dice que los españoles ya hemos cumplimos con nuestra obligación de votar el 28 de abril, y ahora los partidos son los que tienen que ponerse se acuerdo, siguiendo la voluntad popular, bien dicho es solo eso una frase, pero como los mecanismo constitucionales son los de una joven democracia de 40 años, no puede materializar esa voluntad, todavía. Pero eso no es cierto que nuestra obligación ya se cumplido sino que si nos convocan otra vez hemos ir de a votar en noviembre.
Si nos abstenemos dejamos esa voluntad herida, y lo partidos de izquierda harán lo que les venga en gana, porque en su condición está la de dividir para favorecer sus interese de partidos o personales, no el de la ciudadanía. División como era antiguamente la confrontación ente religiones. Siempre existen y existirán divisiones, nunca será posible el gobierno perfecto de interés general.
Se dice que los españoles ya hemos cumplimos con nuestra obligación de votar el 28 de abril, y ahora los partidos son los que tienen que ponerse se acuerdo, siguiendo la voluntad popular, bien dicho es solo eso una frase, pero como los mecanismo constitucionales son los de una joven democracia de 40 años, no puede materializar esa voluntad, todavía. Pero eso no es cierto que nuestra obligación ya se cumplido sino que si nos convocan otra vez hemos ir de a votar en noviembre.
Si nos abstenemos dejamos esa voluntad herida, y lo partidos de izquierda harán lo que les venga en gana, porque en su condición está la de dividir para favorecer sus interese de partidos o personales, no el de la ciudadanía. División como era antiguamente la confrontación ente religiones. Siempre existen y existirán divisiones, nunca será posible el gobierno perfecto de interés general.
Ramón Palmeral