Lo único que nos queda a los periodistas ante el afeite de artículos, después de los fatales brillos de la ingle infectada de la apisonadora del interés de los redactores, es el orgullo y la dignidad, el auto despido, porque son virtudes que no debemos dejar pisotear, ya lo dejó dicho Jardial Poncela, si esperas el éxito, muérete, si así es muerete en el anonimato antes de que te violen el orto, la dignidad está unida a la pobreza, esta unida al orgullo y el honor.
Es preferible despedirte que dejarte humillar por el poder del redactor. No no de ninguna manera Mundiario tiene ojos de mujer fatal, nido de copia y pega, publicidad y americanismos, humillarte, y afeitarte artículos, de eso nada de nada nunca jamás el autor debe perder la dignidad.
A quien le importa la ingle infectada? A nadie, pero el orgullo del pobre está por encima de todo poder autodespedirte, la vida misma es libertad, morir pisoteado sin honor es lo peor que puede pasar.
Aquellos éxitos de María Pita, Isabel Zendal Gomez, las series de dibujos de humor del León de la Cortes, los dos o tres años de colaboraciones gratuitas, todo olvidado, pasado por la prensa del rodillo diario figital, más y más y más, pero sin memoria, porque Mundiario, gallegos de siempre en secano de lluvia son olvidadizos.
Ante todo, ante que creadores, somos personas.
Mundiario quiere maquinas de coser noticias, crear noticias aunque sean falsas de agencias, para colocar anuncios digitales que son los que pagan, vil metal, pero y las personas, no esperes trato personal y la veteranía no sirve para nada. No soy un burro de noria, ni una vaca de establo, soy un creador de reportajes con estilo personal. Nada de innovar, no, no es así señor director José Luis Gómez. Y si el creador cometiera errores ortográficos contrata a correctores.
En Mudiario no adquieres ni derechos ni reconocimientos, ni cuadros de honor, te tratan a patadas, desecho de abscesos de inglés infectadas.
Ramon Palmeral que fue colaborador de Mundiario.
39 de marzo de 2019, con la ingle abierta y cosida, pero con dignidad.
Es preferible despedirte que dejarte humillar por el poder del redactor. No no de ninguna manera Mundiario tiene ojos de mujer fatal, nido de copia y pega, publicidad y americanismos, humillarte, y afeitarte artículos, de eso nada de nada nunca jamás el autor debe perder la dignidad.
A quien le importa la ingle infectada? A nadie, pero el orgullo del pobre está por encima de todo poder autodespedirte, la vida misma es libertad, morir pisoteado sin honor es lo peor que puede pasar.
Aquellos éxitos de María Pita, Isabel Zendal Gomez, las series de dibujos de humor del León de la Cortes, los dos o tres años de colaboraciones gratuitas, todo olvidado, pasado por la prensa del rodillo diario figital, más y más y más, pero sin memoria, porque Mundiario, gallegos de siempre en secano de lluvia son olvidadizos.
Ante todo, ante que creadores, somos personas.
Mundiario quiere maquinas de coser noticias, crear noticias aunque sean falsas de agencias, para colocar anuncios digitales que son los que pagan, vil metal, pero y las personas, no esperes trato personal y la veteranía no sirve para nada. No soy un burro de noria, ni una vaca de establo, soy un creador de reportajes con estilo personal. Nada de innovar, no, no es así señor director José Luis Gómez. Y si el creador cometiera errores ortográficos contrata a correctores.
En Mudiario no adquieres ni derechos ni reconocimientos, ni cuadros de honor, te tratan a patadas, desecho de abscesos de inglés infectadas.
Ramon Palmeral que fue colaborador de Mundiario.
39 de marzo de 2019, con la ingle abierta y cosida, pero con dignidad.