El discurso de Pesro Sánchez es el de yo voy a cambirlo todo, pero la realidad es que nada cambia, y todo sigue igual. Echar a Mariano Rajoy para poenrme yo, pero yo no puedo hacer nada -dice Sánchez-, porque cometería prevaricación. La frase sería: Cambiarlo todo para que nada cambien, y seguir como siempre". hay duplicidad de servicios públicos entre el Estado central y la Autonomías, pero no se puede cambiar porque afectaría al empleo. No se puede interrogar a Juan Carlos I y su dinero en Suiza. No se puede dar el nombre de los defraudadores fiscales de la amnistía, por lo tanto nos hallamos como antes. No puede autorizar un referendum en Cataluña, porque es anticonstiticional. Sanchez ofrece diálogo dentro del marco de la Constitución, pero es es diálogo para alargar la legislatura.
Pedro Sánchez no puede hacer nada en el Congreso sin contar con los independestistas, podemistas y otros grupos parlamentarios. Mucha voluntad no es suficiente, no se puede gobernar con 84 diputados. La única solución para el otoño, es al de preparar las elecciones legistativa para la primavera de 2019.