Los ocho ex consejeros del ex gobierno catalán
están ya en la cárcel, preventivos hasta que llegue el juicio por rebelión,
sedición y malversación de caudales públicos. Llevaban dos años preparando su
delito de golpe de estado a España. Siguen trabajando en la cárcel por la
república, seguro que sí. Conspirando contra la unidad de España. Debe ser
duro, despertarte a media noche y verte en prisión y te queda aún 30 años por
delante.
Los Jordi l y Jordi ll, también llevan ya 17 días y parece que ya han entrado en la realidad.
Los delitos cometidos son tan graves que la empresas catalanas han cambiado su sede ante la inseguridad jurídica, y ante la inseguridad económica. Han destrozado la economía y van a llevar a mucha gente al paro. Y miles ser millones de euros. Estaban advertidos y sabían lo que hacían
A estas personas independentistas no les entra en la cabeza que hay una Constitución que hay que cumplir. Cataluña es España. Y esto no es una mentira encubierta es la verdad.
El cobarde Puigdemont y 4 consejeros huidos, qué vergüenza. Estos eran los líderes que llevo a miles de personas en una falsedad a votar el 1 de octubre, en un referéndum ilegal.
No respetan al Tribunal Constitucional.
Los separatistas viven en un mundo virtual, sin los pies en el suelo de la cruda realidad.
En 1640, ya se proclamaron los catalanes la república que se la entregaron al rey francés, hubo una guerra, la de Monyuit, con miles de muertos, años después Felipe IV, consiguió vencerlos.
Jamás Cataluña va a ser una república independiente.
Por muchas manifestaciones que se hagan, es perder el tiempo.
Las redes sociales y los medios de comunicación están que arden, pero es un fuego virtual, nada de nada.
Son las 5.06, y estos ceporros independentistas en la cárcel, sin libertad, sin móviles y sin tabletas, han de cumplir por sus delitos.
Si lo miramos desde otro punto de vista, la exigencia de los catalanes independentistas los han metidos en las cárceles. Entre los barrotes de su bandera independentistas. Ahora a lamentarse.
Ahora esa mayoría silenciosa de fatales constitucionalistas han de ir a votar todos el 21 de diciembre, porque si gabán otra vez los independentista, nunca jamás se podrá pasar página y volver a la normalidad social, legal y laboral. Esto es más que una mala pesadilla.
Debe quedar claro que se puede pensar diferente, pero siempre dentro del Estado de Derecho y de la Carta Magaña.
Los Jordi l y Jordi ll, también llevan ya 17 días y parece que ya han entrado en la realidad.
Los delitos cometidos son tan graves que la empresas catalanas han cambiado su sede ante la inseguridad jurídica, y ante la inseguridad económica. Han destrozado la economía y van a llevar a mucha gente al paro. Y miles ser millones de euros. Estaban advertidos y sabían lo que hacían
A estas personas independentistas no les entra en la cabeza que hay una Constitución que hay que cumplir. Cataluña es España. Y esto no es una mentira encubierta es la verdad.
El cobarde Puigdemont y 4 consejeros huidos, qué vergüenza. Estos eran los líderes que llevo a miles de personas en una falsedad a votar el 1 de octubre, en un referéndum ilegal.
No respetan al Tribunal Constitucional.
Los separatistas viven en un mundo virtual, sin los pies en el suelo de la cruda realidad.
En 1640, ya se proclamaron los catalanes la república que se la entregaron al rey francés, hubo una guerra, la de Monyuit, con miles de muertos, años después Felipe IV, consiguió vencerlos.
Jamás Cataluña va a ser una república independiente.
Por muchas manifestaciones que se hagan, es perder el tiempo.
Las redes sociales y los medios de comunicación están que arden, pero es un fuego virtual, nada de nada.
Son las 5.06, y estos ceporros independentistas en la cárcel, sin libertad, sin móviles y sin tabletas, han de cumplir por sus delitos.
Si lo miramos desde otro punto de vista, la exigencia de los catalanes independentistas los han metidos en las cárceles. Entre los barrotes de su bandera independentistas. Ahora a lamentarse.
Ahora esa mayoría silenciosa de fatales constitucionalistas han de ir a votar todos el 21 de diciembre, porque si gabán otra vez los independentista, nunca jamás se podrá pasar página y volver a la normalidad social, legal y laboral. Esto es más que una mala pesadilla.
Debe quedar claro que se puede pensar diferente, pero siempre dentro del Estado de Derecho y de la Carta Magaña.
3-11-2017
Ramón Palmeral