Los sacerdotes acusados de abusos a menores en Granada son tres; el resto, encubridores
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Además del denunciante, podría haber más víctimas de los presuntos abusos
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El caso podría afectar a otras cuatro personas, alguna de las cuales podría ser una mujer
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El arzobispo de Granada continúa, de momento, sin dar explicaciones
"Todo podría haberse evitado si el arzobispo hubiese actuado nada más conocer la denuncia". Un portavoz oficioso de la Diócesis afirmaba así a EL MUNDO su convicción de que la inacción del Arzobispado tras la primera denuncia, años atrás, ha propiciado el escándalo que en los últimos días atraviesa a la Curia de Granada, a raíz de la intervención del Papa, quien, además de llamar a la víctima para mostrarle su solidaridad personal, obligó a la jerarquía eclesiástica a actuar contra los sacerdotes denunciados.
La víctima es ahora el denunciante, porque el caso podría afectar a cuatro personas más. Incluso, alguna de ellas podría ser una mujer, todos ellos menores de edad cuando se produjeron los hechos. Tras la intervención del Pontífice, son doce personas las que el Arzobispado ha apartado de sus funciones: tres sacerdotes, sobre quienes pesa la acusación directa de ser los autores de los hechos. Además de ellos, otros siete religiosos también estarían implicados como encubridores, además de dos seglares en idéntico grado de implicación, según informaciones recogidas por el diario Ideal.
Ninguno de ellos está hasta el momento imputado, aunque todos ellos están siendo investigados por el Juzgado de Instrucción número 4, que ha decretado el secreto del sumario y se ha hecho cargo del caso a raíz de la querella de la Fiscalía, ante la que el denunciante se dirigió tras la intervención personal del Papa Francisco. Mientras el subdelegado del Gobierno, Santiago Pérez, hablaba de posibles detenciones, fuentes de la Audiencia descartaban que haya habido o vaya a haber arrestos, aunque en los próximos días se podría asistir a la declaración judicial de los inculpados.
.......................NUEVO IMPULSO......................
Ante la no exigencia de que salgan las fotos de los curas o sacerdortes pederatas en la prensa es de todos notos. A lo mejor el Podemos de Pablo Iglesias, puede exigir que veamos sus caras como lo hemos estando viendo la de Antonio Ortiz.
Este asunto de la pederasia de los sacerdotes es además de una cuestión religiosa un delito público, por ello no deben ser encubiertos. Y pedro perdón como ha hecho el Papa Francisco no es suficiente, esto no es una confesión, penitencia y comunión. Pecados que son absueltos por la dinividad de Dios y la transfiguración del Cuerpo de Cristo.
Exigimos ver sus caras en la Prensa y en a teleivisión. No puede haber descrimicación, pues nos convertimos en complices de una omisión del deber de informar. Quiero a periodistas valientes en Granada ¡ya!
Que no coaccione a los medios la Conferencia Episcopal Española, con su ocultismo de siempre.
