La hipocresía anglosajona se refleja en las
costumbres heredadas del conservadurismo de la sociedad norteamericana,
multirracial, multicultural, desestructurada familiarmente, donde imperan las apariencias de
tener cosas por medio del poder económico, y tópicos como clichés de los que no se pueden
desprender los guionistas. Excepto el grupo étnico de hispanoamericanos y
chinos que llevan su vida independiente a
la del gringo o yanky.
Existen dos grandes grupos de películas: las de violencia y a comedia.
Dentro de la violencia están las de guerra, las de matanzas con armas
sofisticadas, espías de la CIA o del FBI, las intrigas gubernamentales del
poder, o criminales psicópatas, disparos y pistolas; en cambio, el puritanismo
permanente “hollywoodiano” prohibe fumar o decir palabrotas o insultos. Pero
las armas, que en Europa y en España odiamos, las usan, compran y venden como
juguetes. En el cine los peligrosos casi siempre son afroamericanos,
puertoriqueños, italianos mafiosos o algún sudamericano. Eso sí cuando tienen
que buscar a alguien que interprete a un latino, ellos lo ponen, no le pintan
la casa ni nada de eso.
El segundo bloque es la comedia con los
mismos clichés sobre prohibido fumar, decir palabrotas enseñar un pecho o un pene,
en cambio se puede beber alcohol a mantas porque es masculino y asumir que se
consumen drogas débiles como la mariguana. El eje principal de la comedia es el
matrimonio que acaba en boda, los protagonistas siempre están divorciados,
separados o vienen de una relación dificultosa, tienes hijos de otros
matrimonios. Los hijos de ambos siempre son rebeldes son problemáticos como dando a
entender que son victimas de la separación de los padres. Otro tema tabú es el
aborto, ya que la industria del cine propaga tener hijos.
Los
oficios de las protagonistas suelen ser camareras, altas ejecutivas,
periodistas o tienen su propio negocio de flores o de galletas caseras. También
suelen ser casadas que tienen algún desliz matrimonial o antiguo adulterio con
un guaperas una noche de borrachera, y la mañana del día siguiente ella no se
acordará de nada, y como una tonta le preguntará al hombre qué paso anoche que
no me acuerdo. Las mujeres borrachas están muy mal vistas en la sociedad
española y latina. La virginidad en la mujer joven está mal vista, es que mejor
que alguien la haya desvirgado en el Instituto, al entrar en la pubertad, es
como una señal de independencia y liberalismo. También puede beber alcohol como
un hombre, y no fumará.
Los jueces siempre son hombres o mujeres
de color, lo que da a entender que es la cuota que le impone el sindicato de
actores a la productora. En cambio, los fiscales y abogados defensores son
siempre hombres o mujeres blancas. En ninguna película que yo recuerde aparecen
mujeres abogadas, o cirujanas de color, como si en a vida real no las hubiera. Por
lo general, a las afroamericanas las presentas como mujeres policía, madres
gordas que viven en bloques de pisos, mientras los blancos viven siempre en
urbanizaciones o en casas grandes con piscina. Y la envidia está muy a flor de
piel. Y es que el machismo de los norteamericanos presenta a una mujer
maltratada psicológicamente, un poco tonta, siempre con faldas, sin pantalones,
bebedora y con muchas ganas de que las quieran.
El concepto de familia que
tenemos los hispanos no existe para ellos, los hijos abandonan el hogar con 18
años, y se acabó la relación paterno-filial. La relación familiar de los
protagonistas se ampara siempre en algún amigo o amiga que conocieron en el
instituto o en la universidad (no existe otra forma de conocerse). Cuando tiene
problemas económicos, sociales o de hijos, jamás acudirán a los padres, por lo general la madre está sola en alguna
residencia o con problemas de salud. En
el cine quienes peor visto salen son el padre, al que casi siempre presentan
como un maltratador de un infancia, alcohólicos, pendencieros y que los les
abandonó de pequeño, de aquí proviene el
odio al padre.
Las muestras sociales frecuentes son los
entierros, en toda película verás uno, a la forma tradicional, parece que no
existen tanatorios ni incineración. Las fiestas son el día de Acciones de
Gracias, donde una vez al año se reúne toda la familia y sabemos que van a
salir peleados, lo mismo que en alguna cena familiar. Otra fiestas son los
cumpleaños y la famosa palabras ¡sorpresa!. Otra fiesta es el día de la
Independencia de los EE.UU, del 4 de julio. Otras es Halowey y la Navidad.
El cine de Hollywood es un potente industria, que retrata la vida de los
norteamericanos como alcohólicos, ligeros de pistolas, mucho psicópatas, el
hombre se muestra como algo calzonazos, con mucho miedo a sufrir un divorcio, y
si recibiera alguna bofetada de mano blanca (mujeres) nunca responderá a las
bofetadas femeninas porque está pena y muy mal visto pegar a una mujer.
Esto es lo que yo veo y escribo en Alicante, a 16 de octubre de
2014-10-16
Ramón Palmeral
La hipocresía anglosajona se refleja en las
costumbres heredadas del conservadurismo de la sociedad norteamericana,
multirracial, multicultural, desestructurada familiarmente, donde imperan las apariencias de
tener cosas por medio del poder económico, y tópicos como clichés de los que no se pueden
desprender los guionistas. Excepto el grupo étnico de hispanoamericanos y
chinos que llevan su vida independiente a
la del gringo o yanky.
Existen dos grandes grupos de películas: las de violencia y a comedia.
Dentro de la violencia están las de guerra, las de matanzas con armas
sofisticadas, espías de la CIA o del FBI, las intrigas gubernamentales del
poder, o criminales psicópatas, disparos y pistolas; en cambio, el puritanismo
permanente “hollywoodiano” prohibe fumar o decir palabrotas o insultos. Pero
las armas, que en Europa y en España odiamos, las usan, compran y venden como
juguetes. En el cine los peligrosos casi siempre son afroamericanos,
puertoriqueños, italianos mafiosos o algún sudamericano. Eso sí cuando tienen
que buscar a alguien que interprete a un latino, ellos lo ponen, no le pintan
la casa ni nada de eso.
El segundo bloque es la comedia con los
mismos clichés sobre prohibido fumar, decir palabrotas enseñar un pecho o un pene,
en cambio se puede beber alcohol a mantas porque es masculino y asumir que se
consumen drogas débiles como la mariguana. El eje principal de la comedia es el
matrimonio que acaba en boda, los protagonistas siempre están divorciados,
separados o vienen de una relación dificultosa, tienes hijos de otros
matrimonios. Los hijos de ambos siempre son rebeldes son problemáticos como dando a
entender que son victimas de la separación de los padres. Otro tema tabú es el
aborto, ya que la industria del cine propaga tener hijos.
Los
oficios de las protagonistas suelen ser camareras, altas ejecutivas,
periodistas o tienen su propio negocio de flores o de galletas caseras. También
suelen ser casadas que tienen algún desliz matrimonial o antiguo adulterio con
un guaperas una noche de borrachera, y la mañana del día siguiente ella no se
acordará de nada, y como una tonta le preguntará al hombre qué paso anoche que
no me acuerdo. Las mujeres borrachas están muy mal vistas en la sociedad
española y latina. La virginidad en la mujer joven está mal vista, es que mejor
que alguien la haya desvirgado en el Instituto, al entrar en la pubertad, es
como una señal de independencia y liberalismo. También puede beber alcohol como
un hombre, y no fumará.
Los jueces siempre son hombres o mujeres
de color, lo que da a entender que es la cuota que le impone el sindicato de
actores a la productora. En cambio, los fiscales y abogados defensores son
siempre hombres o mujeres blancas. En ninguna película que yo recuerde aparecen
mujeres abogadas, o cirujanas de color, como si en a vida real no las hubiera. Por
lo general, a las afroamericanas las presentas como mujeres policía, madres
gordas que viven en bloques de pisos, mientras los blancos viven siempre en
urbanizaciones o en casas grandes con piscina. Y la envidia está muy a flor de
piel. Y es que el machismo de los norteamericanos presenta a una mujer
maltratada psicológicamente, un poco tonta, siempre con faldas, sin pantalones,
bebedora y con muchas ganas de que las quieran.
El concepto de familia que
tenemos los hispanos no existe para ellos, los hijos abandonan el hogar con 18
años, y se acabó la relación paterno-filial. La relación familiar de los
protagonistas se ampara siempre en algún amigo o amiga que conocieron en el
instituto o en la universidad (no existe otra forma de conocerse). Cuando tiene
problemas económicos, sociales o de hijos, jamás acudirán a los padres, por lo general la madre está sola en alguna
residencia o con problemas de salud. En
el cine quienes peor visto salen son el padre, al que casi siempre presentan
como un maltratador de un infancia, alcohólicos, pendencieros y que los les
abandonó de pequeño, de aquí proviene el
odio al padre.
Las muestras sociales frecuentes son los
entierros, en toda película verás uno, a la forma tradicional, parece que no
existen tanatorios ni incineración. Las fiestas son el día de Acciones de
Gracias, donde una vez al año se reúne toda la familia y sabemos que van a
salir peleados, lo mismo que en alguna cena familiar. Otra fiestas son los
cumpleaños y la famosa palabras ¡sorpresa!. Otra fiesta es el día de la
Independencia de los EE.UU, del 4 de julio. Otras es Halowey y la Navidad.
El cine de Hollywood es un potente industria, que retrata la vida de los
norteamericanos como alcohólicos, ligeros de pistolas, mucho psicópatas, el
hombre se muestra como algo calzonazos, con mucho miedo a sufrir un divorcio, y
si recibiera alguna bofetada de mano blanca (mujeres) nunca responderá a las
bofetadas femeninas porque está pena y muy mal visto pegar a una mujer.
Esto es lo que yo veo y escribo en Alicante, a 16 de octubre de
2014-10-16
Ramón Palmeral
.......................................... Traducción automática..........
Anglo-Saxon hypocrisy is reflected in the inherited customs of the conservatism of American society, multiracial, dysfunctional family, where prevail appearances have through economic power, are cliches that the writers not be detached. Except for the ethnic group of Americans and Chinese leading her independent life to the gringo or yanky. There are two major groups of films: the comedy and violence. Within the violence are those of war, the killing with sophisticated weapons, spies of the CIA or the FBI, the governmental machinations of power, or criminal psychopaths, shooting and guns; on the other hand, "Hollywood" permanent Puritanism prohibits smoking or say.
Anglo-Saxon hypocrisy is reflected in the inherited customs of the conservatism of American society, multiracial, dysfunctional family, where prevail appearances have through economic power, are cliches that the writers not be detached. Except for the ethnic group of Americans and Chinese leading her independent life to the gringo or yanky. There are two major groups of films: the comedy and violence. Within the violence are those of war, the killing with sophisticated weapons, spies of the CIA or the FBI, the governmental machinations of power, or criminal psychopaths, shooting and guns; on the other hand, "Hollywood" permanent Puritanism prohibits smoking or say.