EFE / RÍO DE JANEIRO La selección española se ejercitó en un campo anexo al estadio olímpico Joao Havelange, sin los centrales Sergio Ramos y Gerard Piqué entre los titulares que tuvieron sesión de recuperación, y con Cesc Fábregas y Roberto Soldado entrenando al mismo ritmo que los suplentes.
El desgaste físico realizado en la semifinal con prórroga ante Italia y tener un día menos de descanso que Brasil para la final de la Copa Confederaciones preocupa al cuerpo técnico de la Roja, que preparó un ligero entrenamiento a los titulares.
Sin Piqué, con un leve esguince en el tobillo derecho, ni Sergio Ramos, con un golpe, los jugadores que realizaron una carrera continua de diez minutos antes de estirar músculos fueron Arbeloa, Jordi Alba, Busquets, Xavi, Iniesta, Silva, Navas, Pedro y Fernando Torres.
El resto de internacionales españoles se ejercitaron con más intensidad en un terreno de juego en perfectas condiciones pero con poca iluminación, en el que la FIFA pretendía que se volviesen a entrenar mañana por cuidar el césped de Maracaná, escenario de la final.
La selección española no tuvo confirmación hasta última hora de la tarde de que tras las ruedas de prensa oficiales en Maracaná, finalmente sí podría entrenar en el mítico estadio a las 20:30 horas del sábado, en la víspera de la final, como informaron a Efe fuentes de la Real Federación Española de Fútbol (RFEF).
Vicente del Bosque, seleccionador español, dirigió el entrenamiento muy atento a la evolución de Cesc Fábregas, recuperado de los problemas musculares que le impidieron jugar las semifinales y que se perfila titular en la gran final ante Brasil.
Cesc, como Soldado, completaron todo el entrenamiento y trabajaron con intensidad. El doctor Cota estuvo pendiente de ellos, preguntando sus sensaciones a la conclusión. Como el resto de internacionales trabajaron los ejercicios de toque y presión, y acabaron disputando partidos de tres contra tres en reducidas dimensiones, en los que continuamente chutaban a las porterías defendidas por Pepe Reina y Víctor Valdés, en una muestra clara de su buena evolución.
Este sábado, Del Bosque juntará a sus 23 jugadores en Maracaná y probará el equipo que medita alinear en la final de la Copa Confederaciones ante Brasil. Junto a la entrada de Cesc por David Silva, medita introducir alguna novedad más por el cansancio acumulado.