Europa en crisis
Una Europa en crisis con un modelo equivocado de recortes, o un modelo de “minijob” o miniempleos como en Alemania, nos están llevando a la realidad : nuestros euros, lo que producimos en España a penas tienen valor en el mercado internacional. Se puede exportar mucho, pero la mercancías a penas tiene precio. ¿Cuántos tomates hemos de vender para comprar un móvil o un ordenado?
La debilidad de la demanda interna sigue agobiando la evolución de la economía española, que enlaza ya siete trimestres en retroceso, apenas cuatro años después de que la Gran Recesión dejara de destruir valor añadido. El Instituto Nacional de Estadística que, entre enero y marzo, el PIB se dejó un 0,5% respecto al tramo final de 2012. En la comparación anual, la caída es del 2%, tal y como había adelantado el INE hace un mes.
El descenso trimestral del PIB se atenúa si se compara con lo que ocurrió en el cuarto trimestre de 2012, cuando bajó un 0,8%. Pero aun así sigue siendo muy intenso: desde 2008, cuando arrancó la Gran Recesión, solo otros cinco trimestres han deparado resultados peores.
Nuestro políticos europeos no se preocupan de sus ciudadanos, el Banco Central Europe no rebaja los tipos de interés. Los comisarios recortes y recorte pero con hacen inversiones para creer, sin crecimiento jamás habrá salida a la crisis. La glozalización de los mercados sólo tiene ojos, ni pizca de corazón.
Alicante (Comunidad Valenciana)
La pobreza no se evidencia tan sólo por los índices de desempleo, los desahucios y el incremento de personas en las colas de Cáritas y la gente pidiendo en las calles. La pobreza también se refleja en el cierre del tejido comercial de la ciudad, algo que ha puesto de manifiesto la Plataforma de Iniciativas Ciudadanas, PIC, en su Mapa de la Pobreza en Alicante en base a un estudio del urbanista y profesor de la Universidad de Alicante José Ramón Navarro que ha cuantificado 53 comercios y negocios cerrados en los alrededores de la plaza de Gabriel Miró, concretamente entre el Portal de Elche y Gadea, y entre la calle Gerona y la Explanada. Para la PIC, esta situación evidencia que "el zarpazo de realidad tampoco pasa de largo en el mismo centro de la ciudad, en el corazón del comercio tradicional".
Ello se debe simplemente a la pescadilla que se muelle la
cola: menos producción, menos empleos, menos dinero y menos consumo. Ahora
parece ser que como no pueden pagar pensiones, las quieren recortar, esto
supone más pobreza, puesto que muchos nietos e hijos sobreviven de la pensión
de los padres y abuelos.
Nuevo Impulso.
