Se trata de Cincuenta sombras de Grey, la primera novela de la saga erótica de la escritora británica E. L. James, que se estrenó en junio en las librerías españolas y a la que poco después acompañaron la segunda y la tercera entrega de la trilogía, Cincuenta sombras más oscuras y Cincuenta sombras liberadas, con similar éxito.
Las editoriales han calificado esta saga de "porno para mamás" aunque las lectoras abarcan todos los rangos de edad. En España los tres libros son líderes en ventas y este fenómeno editorial lo siguen, "sobre todo, mujeres, de todas las edades, especialmente de 35 a 45 años, que son las que normalmente más libros compran, aunque también hombres", señalan desde la Casa del Libro de Alicante, en cuya lista de ventas se cuela Danza de Dragones -de la saga Canción de hielo y fuego de George R. R. Martin iniciada con Juego de Tronos- entre la trilogía de E. L. James .
Ignacio Suárez, de la librería de El Corte Inglés, no cree que la saga de la autora británica tenga tanto éxito como la del sueco Stieg Laarson, a la que siguió la trilogía en el cine. "Por ahora no tiene tanto impacto, la de Millenium duró mucho tiempo y esta parece que acabará con el verano", opina.
Trigueros apunta que, en estos momentos de caída de venta de libros, estos fenómenos "vienen bien porque económicamente hacen que sobrevivamos y porque para subir los niveles de lectura siempre tiene que haber un mínimo y, aunque no sean grandes libros, sí son grandes ventas, y se pueden crear nuevos lectores".
Fernando Linde, propietario de la librería 80 Mundos, no ha leído Cincuenta sombras de Grey pero reconoce que la trilogía está entre lo más vendido. No obstante, el librero muestra su distancia ante estos fenómenos, "procuro recomendar literatura de calidad, al margen de las modas, e intento llevar a la gente a lecturas más serias. De Philip Roth, por ejemplo, he vendido mucho porque lo he recomendado mucho. También Acabad ya con esta crisis!, de Paul Krugman".
Linde concluye que, para trilogías, se queda con la Transilvana de Miklós Bánffy o la Trilogía de Tora, de Herbjørg Wassmo.
Nota:
El sexo siempre vende, ha vendido y venderá. Y sobre todo si lleva detrás un marketing inteligentes. Luego nos quejamos de que hay violencia de género, malos tratos y porno pernicioso para la juventud. Porque en realidad vivimos en una hipocreía, toleramos la ficción, el cine violento, pero predicamos la paz como un acto de la realidad social y cotidiana. Las lolitas y los señores maduros, en un todo vale de camas redondas, infidelidades y masoquismo. La vida es una falsedad bajo el dominio del consumo del todo vale.
