Leonardo da Vinci utilizó como modelo a su joven amante para pintar la Mona Lisa
La pintura más famosa de todas las que reaizó Leonardo da Vinci no representa a Lisa Gherardini, la mujer florentina cuyo esposo encargó a Leonardo un retrato. Los rasgos de ‘Mona Lisa’ se corresponden mucho más con los de Salai, un joven ayudante del pintor que, según la mayoría de los historiadores, también habría sido su amante.
Salai posó para Leonardo varias veces, por lo que se conoce bien el aspecto que tenía. Según los expertos del Comité para la Valoración de Bienes Históricos de Italia, sus rasgos se asemejan mucho a los de 'La Gioconda', cuya imagen andrógina sería fruto de la conjunción de retratos de un hombre y una mujer.
Decir que ´Mona Lisa´ representa
a Lisa Gherardini sería sólo "una verdad a medias", según Silvano Vinceti, presidente del Comité. El investigador subraya que, cuando Leonardo comenzó a pintar el cuadro, el rostro de ´Mona Lisa´ tenía un gesto más "lánguido". Luego lo retocó varias veces, con lo que adquirió su aspecto actual, mucho más cercano al que tenía su compañero sentimental.