14 de enero de 2025
¿Sabe Pedro Sánchez lo que ocurre en su ministario de Sanidad con el concierto con MUFACE?
El reciente conflicto en torno al concierto de Muface ha puesto de manifiesto las tensiones entre el Gobierno y las aseguradoras, y las dificultades para garantizar la viabilidad de este modelo de asistencia sanitaria para los funcionarios. La ministra de Sanidad, Mónica García, ha atribuido la falta de acuerdo a la decisión de las aseguradoras, señalando que estas consideran que "los asegurados no son rentables". Esto ha llevado a que empresas como Adeslas y DKV renuncien a participar en el nuevo concierto, dejando a ASISA como la única opción viable hasta el momento.
Por su parte, Fernando Campos, consejero delegado de DKV en España, ha calificado la decisión de su compañía como "difícil y muy meditada", aunque inevitable. A pesar del incremento del 33,5% en la prima del nuevo concierto, que alcanzará los 1.262,28 euros anuales por asegurado en 2027, Campos considera que los esfuerzos del Gobierno no han sido suficientes para compensar los retos financieros y estructurales que enfrenta el modelo de Muface. En este sentido, ha subrayado que DKV deja abierta la posibilidad de seguir cubriendo la asistencia en el extranjero, pero únicamente por un año y no por tres, como propone el nuevo acuerdo.
La decisión de DKV y Adeslas no solo refleja una crisis en las relaciones entre las aseguradoras y el Ejecutivo, sino también un cuestionamiento más amplio del modelo de mutualidad sanitaria. Campos ha criticado la falta de previsión y la gestión del proceso, indicando que "se ha tenido tiempo para prepararlo" y llamando a una autocrítica colectiva.
La ampliación del plazo para que las aseguradoras presenten sus propuestas hasta el 27 de enero subraya la urgencia del problema. Aunque el incremento de la prima busca hacer más atractivo el modelo, la salida de dos grandes aseguradoras deja en el aire la sostenibilidad del sistema, que se enfrenta a cambios vertiginosos tanto en el ámbito económico como en el sanitario.
La situación plantea una reflexión sobre el futuro de Muface y la capacidad del modelo para adaptarse a las nuevas realidades del sector. Mientras el Gobierno intenta garantizar la continuidad del servicio para los mutualistas, el desenlace dependerá en gran medida de si se logra conciliar los intereses económicos de las aseguradoras con las necesidades de los asegurados. En cualquier caso, la crisis actual evidencia la necesidad de un replanteamiento profundo del sistema para asegurar su sostenibilidad a largo plazo.
Es posible que el empleo de la aseguradoras se vea mermado con despidos.
